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¿Cómo rechazar una oferta de trabajo sin cerrarse puertas?

Escrito por Strider Staff | octubre 04, 2024

El rechazo de una oferta de trabajo es uno de los momentos más complejos en la carrera de cualquier profesional. Los sentimientos encontrados están latentes y todos se encuentran en una gran encrucijada, siempre preguntándose "¿y si no aparece nada mejor?"

Esta difícil decisión puede complicarse aún más cuando tienes que decir "no" a una oferta, pero sin poner en peligro tu relación con la empresa.

Sin embargo, si quieres saber cómo rechazar una oferta de trabajo correctamente, ¡has llegado al lugar adecuado!

Cómo rechazar una oferta de trabajo.

En este post, te daremos consejos sobre cómo comportarte en ese momento, además de guiarte por un proceso real paso a paso para rechazar el trabajo sin cerrarte ninguna puerta. Vamos?

Antes de declinar, valora detenidamente la oferta

Si aún no te has visto en la situación de tener que rechazar una oferta de trabajo, que sepas que llegará el momento.

La cuestión principal es: antes de decir "no", analiza la oferta con calma, siempre teniendo en cuenta tus objetivos y tu momento profesional.

Si ya tienes trabajo, considera los beneficios del puesto, salario, ubicación, conciliación y oportunidades de crecimiento en cada una de las empresas.

La cultura organizativa también tiene que estar alineada con tus valores personales, ya que no tiene sentido aceptar algo que no está en línea con aquello en lo que crees.

La cultura organizativa también tiene que estar alineada con tus valores personales.

Por último, pero no menos importante, asegúrate del motivo de la transición e intenta imaginar cómo sería trabajar allí cada día. Si es posible, habla con otros profesionales que ya estén en la empresa.

Estos son algunos de los motivos por los que los profesionales renuncian a una oferta. ¡No eres el único!

Principales motivos para rechazar una oferta de trabajo

Salario y prestaciones inadecuados

Una de las razones más comunes para rechazar una oferta es cuando el paquete salarial y los beneficios ofrecidos no cumplen las expectativas del profesional. Esto puede incluir un salario inferior al esperado, beneficios insatisfactorios, la falta de un plan de carrera claro u otros problemas de compensación.

Aquí, es importante considerar que si la remuneración es el único motivo de rechazo, evalúe su situación financiera, sus prioridades de carrera y su momento profesional.

Muchas veces, la oferta de beneficios no cumple con las expectativas del profesional.

A menudo, dependiendo de la empresa, merece la pena aceptar un salario menos competitivo si las oportunidades de crecimiento y aprendizaje son buenas, o si el paquete de beneficios compensa el menor sueldo neto.

Falta de oportunidades de crecimiento

Esto podría incluir una falta de programas de formación, limitaciones en la estructura organizativa o una falta de apoyo al aprendizaje continuo.

Desajuste cultural

La cultura de la empresa desempeña un papel importante en la satisfacción laboral. Si sientes que la cultura de la organización no está alineada con tus valores, principios o estilo de trabajo, deberías rechazar la oferta. Esto es bastante habitual, sobre todo entre los profesionales de la tecnología.

Ubicación geográfica o zona horaria

La ubicación del trabajo también puede ser un factor determinante. Si la oferta requiere que te traslades a una zona geográfica que el profesional considera inadecuada, alejada de tu familia o que presenta dificultades logísticas, puedes optar por rechazarla. Recuerde tener en cuenta los pros y contras de trabajar fuera de Brasil.

Además, si el puesto es a distancia, es posible que no te adaptes del todo al horario del país donde la empresa tiene su sede, en caso de que haya necesidad de trabajar según el huso horario local.

Conflicto de horarios o prioridades personales

A veces los profesionales tienen conflictos de horarios con otros compromisos personales o prioridades importantes en sus vidas. Esto puede incluir cuidar a alguien de la familia, seguir estudiando, emprender un proyecto personal u otras responsabilidades que hacen imposible aceptar la oferta.

Experiencias negativas con la empresa.

Si un profesional ha tenido experiencias negativas previas con la empresa, como una cultura tóxica, una mala gestión, una falta de ética o una falta de respeto hacia los empleados, puede optar por no aceptar una oferta de la misma organización.

Una forma de evaluar esto sin conocer la organización de antemano es visitar páginas de reputación y recomendación de empleados, como Glassdoor.

A la hora de decidir si rechazar o no una oportunidad, hay que tener en cuenta todos estos factores.

Tras analizar estos puntos, valore si está 100% seguro de su decisión. Si la respuesta es a favor de la negativa, sigue sin miedo los siguientes pasos:

¿Cómo rechazar educadamente una oferta de trabajo?

Para rechazar una oferta de trabajo, hay que saber posicionarse de forma profesional, educada y comprometida. Al fin y al cabo, otras personas compiten contigo y la empresa necesita una postura veraz sobre tus próximos pasos.

Pero esta comunicación no puede hacerse sin más. Por eso es importante que:

1. Proporcione una respuesta rápida y transparente

Una vez que haya tomado su decisión, asegúrese de ponerse en contacto con la persona que le hizo la oferta lo antes posible. En este punto, es importante ser transparente y utilizar siempre un tono profesional.

Un punto importante es prestar atención al canal de comunicación utilizado. Si esperan un correo electrónico por tu parte, escríbelo de forma respetuosa y completa. Lo mismo ocurre con las llamadas telefónicas o videollamadas.

2. Agradece la oportunidad

Una vez que hayas contactado con el responsable de la vacante a través del canal adecuado, recuerda agradecerle el tiempo dedicado al proceso de selección y recalca que ha sido una decisión difícil, pero que valoras la oportunidad recibida.

3. Explica tu decisión con educación

Sea claro sobre su decisión de rechazar la oferta, pero sin entrar en excesivos detalles. Explica que tu elección se basa en tu búsqueda del mejor encaje profesional y evita mencionar mejores ofertas u oportunidades que hayas podido recibir.

No olvides que el networking es esencial, y que debes mantener las puertas abiertas para futuras oportunidades.

Si lo consideras oportuno, pregunta si a la empresa le gustaría recibir recomendaciones de personas que tengan un perfil similar al tuyo e intenta ser cordial en la búsqueda de otros talentos.

4. Ofrece un feedback constructivo

Si el proceso de selección ha sido abierto y distendido, y si lo considera oportuno, ofrezca y pida feedback sobre la experiencia que ha tenido durante las etapas.

Resalta los puntos fuertes y sugiere mejoras, sin ser negativo ni crítico. Esto demostrará que realmente te importa el tiempo invertido, además de ser útil. Así, seguro que te recuerdan de forma positiva.

5. Termina con una nota amistosa

Una vez que hayas terminado de decir lo que había que decir, no busques nuevas excusas ni alargues la conversación más de lo necesario.

El momento adecuado para terminar la reunión es justo después de haber expuesto tus puntos y haber recibido algún feedback del reclutador. No seas prolijo, pero también sé amable y cordial.

Vacante, propuesta y oferta: todo el proceso debe tratarse con profesionalidad.

El rechazo de una oferta de trabajo es un momento delicado pero necesario en la búsqueda del mejor encaje profesional. Puede que el proceso de selección haya sido bueno, puede que hayas tenido un gran encaje cultural con la empresa, pero puede que no sea tu momento ideal para cambiar de trabajo o de organización.

Si tu elección ha sido la de cambiar de empresa, puede que no sea el mejor momento para hacerlo.

Si tu decisión ha sido no seguir adelante con la oferta, sigue los consejos y el protocolo profesional para preservar las relaciones y mantener las puertas abiertas. Pero recuerda que tú eres quien decide en última instancia sobre tu propia carrera profesional.

Es decir: no te dejes llevar por los consejos de los demás. Escucha a amigos, parientes y familiares, pero asegúrate de que la decisión se toma de acuerdo con tus valores y prioridades.

Ten en cuenta también que rechazar una oferta puede llevarte a mejores oportunidades en el futuro. Lo importante es que seas profesional y transparente -tanto contigo mismo como con la empresa que te ofreció el trabajo.

Por último, recuerda que toda relación laboral es una relación comercial. Como tal, los acuerdos que se tomen deben ser siempre buenos y ventajosos para ambas partes.